Henri Bauer, Paris, November 2004
Cómo construir un “Arte de la Paz”? El camino seguido por la Fundación Charles Léopold Mayer para el Progreso del Hombre (FPH) et sus desafíos
Dado las experiencias vividas, la construcción de un Arte de la Paz se ha vuelto, poco a poco, una des las prioridades de la FPH.
La FPH habitada por el desafío de la paz
Desde su creación en 1982, la FPH ha sido habitada por la búsqueda de la paz. En esa época el mundo estaba todavía herido por las dos Guerras mundiales del siglo 20. Las palabras “totalitarismo”, “campo de concentración”, “Shoah”, “genocidio”, resonaban en su corazón naciente. La guerra fría en decandencia entre Estados Unidos y la URSS todavía causaba estragos en los países del sur, antiguas guerras surgían nuevamente, nuevos conflictos explotaban aquí y allí… Lejos de ser indiferentes a todos esos dramas, los iniciadores de la FPH se sentían profundamente concernidos por los desafíos mayores de la humanidad : desde el principio, se involucraron en la construcción de paz.
En los anos 1980, la FPH decidió apoyar a dos iniciativas importantes : la creación de la “Escuela de la Paz”, en Grenoble (Francia) y la del “Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP)”, en Colombia.
A partir de esas iniciativas, la FPH ha optado por la paz y creó el programa “Construcción de paz”. Convencida que la construcción de la paz ne se reduce a un cambio político y económico sino que implica todo un proceso de otra amplitud, el programa se articuló alrededor de 3 ejes :
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Apoyar a los que tratan de establecer procesos de paz, en particular por medio del acercamiento de experiencias concretas.
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Manejar juntos los distintos niveles de violencia : del individuo a la sociedad, de lo local a lo internacional, tratando de entender los mecanismos de los conflictos.
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Valorizar propuestas concretas para favorecer una gestión pacífica de los conflictos.
Esta triple dinámica, contribuía a definir progresivamente los distintos componentes de un Arte de la paz.
En los anos 1990, que fueron marcados por la multiplicación y complicación de lo que llamábamos en esa época “los nuevos conflictos”, la FPH ha querido responder en toda su diversidad a esas exigencias. Ha empezado a apoyar a iniciativas de paz en Burundi, Ruanda, Congo Brazzaville, Congo RDC, Etiopia, Ex-Yougoslavia, Colombia, Afghanistán….
Una dinámica transversal y convergente iba estableciéndose : varios socios de la FPH organizaban encuentros continentales, temáticos y colegiales, y de ésta manera el trabajo realizado iba ampliándose tomando en cuenta otras iniciativas, otros actores, espacios y culturas. Esta apertura dio lugar, en 1993, a la creación de una Plataforma para un mundo Responsable y Solidario. En esa época, el compromiso responsable para la construcción de paz era un imperativo ético : las tragedias en Africa de los Grandes Lagos de los cuales el drama en Ruanda constituyó una de las manifestaciones más relevantes ; los afrontamientos en los Balkanes incluyendo la insostenible estrategia de la limpieza étnica ; otros dramas tan violentos como desconocidos en esa época no dejaron indiferentes a los pioneros de lo que ha vuelto a ser, en 1994, la “Alianza para un mundo responsable plural y solidario”. Esta Alianza permitió que un número importante de actores de paz en el mundo se conocieran, comunicaran y se encontraran.
En el comienzo del siglo 21
Las experiencias acumuladas se articulan cada vez mejor con dinámicas ciudadanas convergentes. Estas se conretizan con propuestas precisas, elaboradas de manera colectiva : encuentros continentales, cuadernos de proposiciones, una Carta de Responsabilidades.
Muchos de esos actores se han conocido en 2001, durante la primera “Asamblea mundial de Ciudadanos”.
Muchos de los artesanos de paz que se conocen a través de la Alianza para un Mundo Responsable, plural y solidario” u otras iniciativas, toman conciencia de lo importante que es enriquecerse mutuamente, aliarse. Varios de ellos han manifestado el deseo de actuar juntos.
Estos actores se hacen preguntas mayores, por ejemplo :
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¿Cómo actuar frente a cuestiones tan complejas como las de la gobernanza, de la economía, de las relaciones del hombre con la biósfera, etc? Frente a los desafíos actuales de la humanidad ya no se puede actuar en solitario. Es cuando articulamos nuestras capacidades que podemos ser eficaces. ¿Cómo podemos cruzar nuestras miradas, hacer que nuestras acciones convergen, valorizar mutuamente nuestro “saber-hacer”? Establecer alianzas parece ser un método pertinente y necesario.
Entre los desafiós más importantes para el futuro de la humanidad, el de la paz es uno de los desafíos mayores. La paz, no sólo como la ausencia de guerra sino como “el arte de vivir juntos”. ¿Cómo podemos federar nuestras distintas experiencias para reenforzar juntos el sector de la paz? ¿De alguna manera Internet podría contribuir a facilitar los intercambios entre artesanos de paz, o hasta ayudar a crear alianzas?
Dado las experiencias vividas, en particular las que han permitido responder al odio por la tolerancia, a la incomprensión por el diálogo, a la violencia recíproca por la búsqueda de modalidades de gobernanza facilitando la gestión pacífica de las diferencias y de los conflictos provocados por toda relación humana…. la construcción de paz se ha vuelto poco a poco una de las prioridades de la FPH. En coherencia con ese impulso, ésta ha decidido apoyar la creación de la iniciativa IRENEES.
Gracias a un compromiso por la paz tan rico como exigente, la FPH propone hoy un capital simbólico importante sobre el arte de la paz, apoya la emergencia de una Alianza mundial de Artesanos de Paz, enriquece el sitio web de recursos para la paz “Irenees.net” como método de encuentro, intercambio y proposiciones.